Tengo que dejar de dibujar espirales que llevan tu nombre.
Sabia que todo esto no iba acarrearme más que problemas, pero habia que intentarlo.
Y tengo que dejar de dibujar espirales con letra C, o mejor, sin letras. Dejar de dibujar espirales que te recuerden. Por que me he perdido en una de esas espirales tuyas sin salida y tengo que encontrarme.
El espejo no me reconoce y se me está olvidando como era yo de verdad, la que tu conociste, sin rojo en el pecho, con calcetines a rayas y desparejados.
Se me está olvidando y tengo que encontrarla.
Así que o la traes, o te esfumas.
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